Importar productos y venderlos en México pareciera una forma sencilla para construir un negocio muy rentable, sin embargo, para que esto sea todo un éxito necesitas tener una visión completa de todo el proceso para que puedas analizar costos y riesgos en cada paso.
La buena noticia es que efectivamente es un negocio rentable, pero a cambio exige ser muy acertado a la hora de tomar decisiones.
Si estás pensando en invertir tu dinero en traer algún producto de otro lugar del mundo, por favor evita cometer los siguientes errores:
1. No analizar la viabilidad del negocio
En pocas palabras, un análisis de viabilidad para nosotros es tener los datos duros para decidir si debes detenerte o avanzar, así de simple, y la única forma es haciendo un costeo detallado de todo lo que implica el negocio, puede que en la imaginación del importador todo está perfecto, pero OJO los números no mienten y tomar esto en cuenta a tiempo hará la diferencia entre perder todo o hacerte millonario.
2. No analizar el producto y el mercado
Para que este negocio si sea negocio debes estar completamente seguro de que el producto que piensas traer es lo que el mercado está buscando. Tal vez suena tan obvio que lo damos por hecho, pero, aunque no lo creas hasta al importador más experimentado le puede pasar que por exceso de confianza en su “olfato del negocio” pase por alto algunos detalles que le hagan tener el producto en su bodega durante meses porque simplemente asumió que todo mundo pensaba igual que él.
3. No investigar perfectamente al proveedor y definir las condiciones de compra
Debes saber que a más de uno lo han estafado en este negocio y básicamente han perdido su dinero quedándose sin opción para recuperarlo. Actualmente existe un servicio que te permite auditar a los proveedores en caso de que tu no puedas ir directamente, algunos deciden “ahorrarse” ese costo, pero de verdad vale la pena contemplarlo dentro del monto de inversión que debes hacer para evitar sorpresas, el servicio va desde buscarte proveedores confiables, enviarte fotos de la fábrica y el producto, revisar el control de calidad y gestionar el transporte, si es la primera vez que vas a importar te recomendamos definitivamente buscar un servicio de este tipo.
Otro punto importante es definir las condiciones de compra que básicamente es saber en qué momento del proceso termina la responsabilidad del proveedor y empieza la del importador, lo recomendable es que cada uno se haga responsable de la mercancía en el territorio que conoce, a esto se le llama FOB (FREE ON BOARD).
4. No tener bien clara la fracción arancelaria
Frecuentemente pasa que al no conocer profundamente del tema, los importadores no revisen la fracción arancelaria que corresponde al producto, por lo tanto no sabe cuánto debe pagar de impuestos, si tiene alguna restricción o si requiere un permiso especial, así que aunque parezca complicado debes asesorarte muy bien en este tema y entenderle lo mejor posible ya que el problema puede ir desde que no dejen entrar la mercancía al país (puedes perderla), hasta que estén mal calculados los impuestos (no salgan tus costos como lo esperabas).
5. No tener bien definidos los costos logísticos
Así de simple, sin un buen aliado logístico no hay negocio. En este punto el importador tiene que estar seguro de que tiene un buen aliado, que no solo va a preocuparse por mover su mercancía, sino que tiene la capacidad de prever cualquier situación con el fin de llevar la mercancía al lugar acordado sin incurrir en gastos no contemplados.
6. No contemplar los tiempos
Parece difícil de creer, pero a pesar de saber que la fábrica está al otro lado del mundo y puede haber contingencias en el camino mucha gente aún vende mentiras y te dice que tus productos pueden llegar por ejemplo de China a México en dos semanas.
Mover contenedores tiene su chiste, el proceso empieza desde que haces la orden de compra y depositas el anticipo, después el tiempo que le toma al proveedor fabricar tu pedido, también se tiene que programar la recolección, llevar el pedido al puerto, esperar a que salga el barco, el tiempo de tránsito, el tiempo de descarga en el puerto de México, el despacho aduanal y el transporte a tu bodega, en todo eso lo mínimo que te podrían ofrecer son 6 semanas pero la mayoría se van hasta 7 u 8 semanas. Muchos importadores tienen todo listo para empezar y hasta clientes esperando sus productos y desafortunadamente se les cae el negocio por no tenerlo en tiempo y forma.
Si quieres una asesoría gratuita, no dudes en contactarnos info@move2trade.com
Comparte este link https://bit.ly/2mhHzvL y talvez salves a un futuro importador.
Autor: Karen Rivera
